Los procedimientos buscan reducir la presión intraocular, están indicados en pacientes en quienes no puede alcanzarse una presión adecuada con tratamiento médico, no toleran los medicamentos o su enfermedad progresa a pesar del tratamiento en gotas.
Existen varias alternativas: láser, cirugía microinvasiva, cirugía filtrante e implantes valvulares; su especialista determinará la mejor opción para usted.
Los procedimientos se realizan bajo anestesia local y requerirá realizar estudios preoperatorios.
Al ser procedimientos ambulatorios, el paciente permanecerá en la clínica un promedio de tres horas, deberá acudir en ayuno y con un acompañante. Se recomienda reposo relativo.
La mayor parte de los procedimientos requieren una recuperación con reposo relativo durante una semana, sin embargo, dependerá del tipo de cirugía y la respuesta de cada paciente.
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